Fuego de Ángeles

martes, septiembre 07, 2004

La salida de la no salida.

Ante el miedo a lo doblemente desconocido, Ginebra no sabía hacia dónde ir. Derecha o izquierda. Ahora o nunca. Y eligió izquierda. Y corrió sin gritos. Y cayó de bruces. A los pies de un ángel.